
¿Qué le ‘duele’ a tu negocio? Descúbrelo con la Pirámide de Maslow de las Pymes
Entrepreneur México
Octubre 5, 2020

Por: Rodrigo Ladagga, emprendedor apasionado por ayudar a otros a ser exitosos poniendo a su alcance las mejores metodologías. KREZKO (EMyth + PP), ayudamos a poner orden en tu empresa y crecer.
Recientemente Mike Michalowicz, uno de los autores más prominentes en temas de emprendimiento y pequeñas y medianas empresas (Pymes), hizo el lanzamiento de su nuevo libro Fix This Next, el cual podríamos traducir como Resuelve Esto Primero. Mike es autor de libros best seller como The Pumpkin Plan, Profit First, Surge, entre otros. Personalmente, es uno de los autores que más recomiendo por las poderosas herramientas que crea y propone tomando siempre en cuenta el contexto tan particular de las Pymes.
Yo conocí a Michalowicz porque, Michael E. Gerber autor del libro The Myth Revisited (El Mito del Emprendedor, porqué la mayoría de las Pymes fracasa y que hacer al respecto) – otro autor que recomiendo para cualquier dueño de una Pyme-, lo sugirió.
El autor nos dice que uno de los principales problemas en las Pymes que ha estudiado en los últimos 20 años es que precisamente no saben cuál es su principal problema a resolver. Es decir, que siempre hay tantas cosas que arreglar y mejorar que los dueños de Pymes se pierden en poder priorizar que área o problema atacar primero, cuál después, etc.
Para esto Michalowicz nos propone una herramienta muy sencilla y práctica, pero muy poderosa que es una pirámide de las necesidades básicas de la Pyme, haciendo una analogía con la famosa pirámide de la jerarquía de las necesidades humanas que el psicólogo Abraham Maslow propuso en 1948 en su libro Una Teoría sobre la Motivación Humana.
Para tener el contexto de la Pirámide de Maslow la comento a continuación. El orden va del número uno de las necesidades más básicas al número cinco de las necesidades trascendentales:
NECESIDADES FISIOLÓGICAS: Respiración, alimentación, descanso (refugio), etc.
SEGURIDAD: Seguridad física, de empleo, de recursos, familiar, etc.
AFILIACIÓN: Amistad, afecto, etc.
RECONOCIMIENTO: Confianza, respeto, etc.
AUTORREALIZACIÓN: Trascender, dejar un legado.
Parte de la teoría de Maslow nos dice que es difícil llegar a los niveles superiores de la pirámide cuando los inferiores no se han satisfecho. Esto significa que una persona difícilmente pensará en cómo lograr reconocimiento, respeto y demás si le falta respiración o alimento para subsistir.
Michalowicz realizó una analogía con la pirámide de Maslow y creó la Pirámide de Necesidades Básicas de una Pyme:
VENTAS: Incluye el proceso de ventas hasta el cobro efectivo de la venta.
RENTABILIDAD: Uso eficiente de los ingresos (ventas) para cubrir todos los costos, gastos, etc. de la empresa incluyendo el sueldo adecuado para el dueño o dueños de la Pyme y las utilidades que debería tener la empresa.
ORDEN: Profesionalización y estandarización de procesos.
IMPACTO: Impacto positivo generado hacia todos los stake holders (clientes, colaboradores, dueños de la Pyme, etc.)
LEGADO: Generar un impacto positivo hacia todos, hacia la sociedad, etc. de forma permanente.
Lo que nos propone Michalowicz es enfocarnos en tener un balance en la pirámide, que aunque nunca va a ser perfecto, sí debe ser equilibrado. El emprendedor centrarse en aquel nivel de la pirámide que esté más desbalanceado en cierto momento, sin perder de vista que las bases de la pirámide tienen que estar fuertes. Por ejemplo, una empresa puede estar vendiendo mucho, pero no está siendo rentable. Con esto la pirámide estaría desbalanceada en el segundo nivel de abajo hacia arriaba (RENTABILIDAD) y habría que enfocarse en estos momentos en ese aspecto de la Pyme. Por otro lado, puede haber empresas que estén demasiado enfocadas en el LEGADO, pero tienen sus bases muy débiles. Es decir, no tienen suficientes ventas, rentabilidad y orden.
Aquí es importante aclarar que esto no significa que tienes que sólo enfocarte en un área y no hacer nada con el resto de los niveles de la pirámide hasta que esté “completa”. Sin embargo, esta herramienta te servirá para evaluar que tan equilibrada están las necesidades básicas en tu Pyme para tener claridad en dónde se deberían de enfocar la mayoría de los esfuerzos de la empresa.
Para saber más: 3 historias, 1 camino: ¿Qué están haciendo bien las Pymes que están saliendo adelante la crisis?
Una vez que equilibremos ese nivel de la pirámide o aspecto de la empresa, entonces nos enfocamos en el siguiente nivel (ya sea arriba o abajo dependiendo del desequilibrio que tengamos en ese momento) y así sucesivamente en un continuo enfoque de mejora de cada nivel.
Por ejemplo, una empresa puede hacer un análisis rápido y ver que si bien la empresa está vendiendo y cobrando bien (primer nivel de la pirámide), puede estar teniendo problemas de rentabilidad. Entonces aquí hay que poner toda nuestra creatividad para bajar costos y gastos. También puede suceder al revés: la empresa es muy eficiente en el uso de sus recursos, pero no está vendiendo lo suficiente. Entonces aquí tendrás que enfocarte como prioridad en el área de ventas.
Recuerda: esto no significa que no sigas trabajando en las demás áreas, en los demás niveles de la pirámide, pero lo importante aquí es que tengas claro en todo momento cuál debe ser la prioridad, el enfoque, de tu empresa en estos momentos. Y si utilizamos la muy útil herramienta del Principio de Pareto, podríamos establecer que entre el 70 y 80 % del tiempo y actividades de las personas en la empresa tienen que dedicarse al área o nivel de la pirámide que necesita más enfoque en esos momentos y el resto del tiempo, enfoque y recursos (entre el 20 y el 30%) a las demás áreas.
Espero que esta herramienta te sirva para ponerla en práctica. Ten a la vista siempre la pirámide y ten claro cuál es el área que necesita de más atención en tu Pyme y asegúrate que los recursos estén repartidos adecuadamente para atender la prioridad que necesita tu empresa en estos momentos.
La necesidad de contar con un asesor experto puede mejorar notablemente la aplicación de tecnología digital en una empresa.
Por: Jorge García
Telcel.com en colaboración con WOBI México
La tecnología digital transformó la forma en que operan las empresas en todos sus aspectos; desde elaborar una carta, hablar por teléfono, comunicarse a miles de kilómetros de distancia, operar maquinaria y contactarse con los clientes, hasta almacenar y procesar enormes cantidades de datos.
La tecnología digital ha transformado la manera en que operan las empresas en todos sus aspectos.
Más que en una opción la tecnología digital se ha convertido en una necesidad para las empresas.
Un asesor en tecnología digital define estrategias basadas en las características particulares de una empresa.
Los ejecutivos de una empresa tienen que trabajar estrechamente con el asesor en tecnología digital.
La tecnología digital se convirtió no en una opción sino en una necesidad para que una empresa funcionara y se adaptara a los avances tecnológicos de todo tipo que no dejan de evolucionar en cada momento; no es posible dejar de usar tecnología digital en los tiempos que corren, pero sí es posible gastar innecesariamente en ella y utilizarla de manera inadecuada.
Si la tecnología digital –además de otras tecnologías innovadoras– está hecha para que una empresa funcione mejor en todos los aspectos, aumente su productividad, incremente la calidad de sus productos y se vuelva más rentable, entonces contar con una buena tecnología de este tipo debe ser una prioridad empresarial.
Para asegurar que la tecnología digital de una empresa opere bien no está por demás que, ya sea cuando arranca un proyecto empresarial o una vez que éste ya ha echado raíces, se considere la posibilidad de contratar asesores expertos, que aseguren que el funcionamiento de esta tecnología se ciña a las necesidades particulares de una empresa y así garantizar que la forma en que se utiliza sea la correcta; veamos cómo opera un asesor experto en este rubro.
Las funciones de un asesor
Un asesor –o grupo de asesores– en tecnología digital de entrada le va a advertir a los directivos de una empresa sobre los errores que hay que evitar, las tareas estratégicas que hay que realizar y la actitud correcta que hay que tener al usar esta tecnología.
En primer lugar les hará entender que el uso de tecnología digital no es en sí misma la solución mágica a todos sus problemas, sino más bien una necesidad tecnológica que hay que aplicar de manera inteligente para que se convierta en un factor que catalice los proyectos empresariales.
Lo anterior obliga a los empresarios a aterrizar en el mundo digital y concebirlo de manera realista; de ahí que una empresa con visión y sentido práctico tenga que elaborar una estrategia clara de las formas en que la tecnología digital operará en sus espacios, esto a partir de tener perfectamente definidas las necesidades de la empresa, lo que incluye un manejo prudente del presupuesto que se va a invertir en la compra de tecnología digital.
Necesidad de compromiso empresarial
El asesor experto convencerá además a los ejecutivos de una empresa de que la estrategia para utilizar tecnología digital debe tener en cuenta planes a corto, mediano y largo plazo; al mismo tiempo, un asesor inteligente convencerá a los directivos empresariales a involucrarse en el proceso de la instalación, desarrollo, práctica y actualización permanente de la tecnología digital.
Un aspecto clave que el experto asesor subrayará una y otra vez es el referente a la actitud creativa, que tanto los responsables de las decisiones sobre las políticas sobre tecnología digital como quienes las ejecutan, deben de tener en todo momento, lo que significa estar al tanto de la innovación tecnológica digital y de las formas en que ésta interviene en un negocio que está siempre en proceso de transformación.
Hay que dejar claro que para que el talento y la experiencia de un asesor redunden en un claro beneficio tiene que existir una relación profesional estrecha entre él y la empresa asesorada, lo que implica que los ejecutivos empresariales han de comunicarle con claridad los objetivos, condiciones, presupuestos y proyectos a futuro de la empresa que dirigen.
Por su parte, el asesor tiene que tener un conocimiento certero de las necesidades, posibilidades y aspiraciones de la empresa, pues sin esta información su ayuda no podrá desplegar todo su potencial ni contribuir a que una empresa funcione bien y mejor con tecnología digital.